¡Bienvenidos a la review del Mazda 3!
El nuevo Mazda 3 continúa con el estilo de diseño creado por la marca japonesa hace ya unos años, al que denominó Kodo, “el alma en movimiento”. Se caracteriza por unas líneas muy marcadas y fluidas donde se elimina todo lo que no sea necesario. El resultado es un vehículo con un estilo único, que impresiona cuando lo ves en directo.
Externamente, la característica más destacable de este nuevo modelo de la marca japonesa es la enorme calandra, la cual ya es signo identificativo Mazda. Preside un largo morro que se continúa con un habitáculo muy retrasado. Este aspecto tan peculiar nos recuerda al estilo de grandes deportivos clásicos de las décadas de los 60 y 70.
Sus medidas lo sitúan dentro del segmento B. Siendo éstas, 4,46 m de largo, una anchura, sin retrovisores, de 1,80 m y una reducida altura de 1,43 m.
Este nuevo modelo cuenta con un habitáculo muy particular. Esta ocasión, también se hace notar el diseño KODO, ofreciéndonos algo completamente diferente. Líneas horizontales, con volúmenes muy definidos, todo ello recubierto con materiales de primera calidad, que dejan claro que Mazda busca posicionarse, por derecho propio, en la categoría Premium.
El puesto de conducción resulta muy deportivo, con un asiento muy bajo y envolvente, con todos los mandos próximos y un volante completamente redondo con un buje central pequeño, de aire retro, que evoca nuevamente a épocas pasadas.
El habitáculo es muy espacioso, lo que permite viajar con gran comodidad, tanto en las plazas delanteras como en las traseras. Su maletero tiene una capacidad de 370 litros.
Cuenta con todos los elementos modernos de ayuda a la conducción:
Su sistema multimedia es muy completo, rápido, con una facilidad enorme para la conexión de periféricos, así como un uso muy intuitivo.
En la parte mecánica, cuenta con dos grandes novedades:
En cuanto nos ponemos a los mandos del Mazda 3 sentimos una gran comodidad. La sensación de integración con el coche resulta muy agradable, y el tacto de todos los mandos denota solidez.
El puesto de conducción tiene una postura muy baja, cerca del suelo, lo que aporta una tremenda deportividad al vehículo.
La dirección de este nuevo modelo de Mazda, es muy precisa, variable y nos aporta una gran sensación de control.
En cuanto a la insonorización, es muy buena, solo escucharemos el motor en momentos de aceleración, potenciando el clima deportivo que aportan el resto de elementos.
Los consumos del nuevo Mazda 3 son muy ajustados. En un uso mixto resulta muy fácil bajar de los 6 litros a los 100 km de media.
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